Es una de las comidas más importantes del día y es básico para llevar una alimentación saludable. A los españoles nos encanta un buen desayuno con el que empezar el día, y si tienes la suerte de poder tomarlo tranquilamente sin las prisas del tiempo, ¡Estás de suerte! Hoy os damos una lista con 3 lugares en Barcelona para ir a desayunar como un rey.
Marcos es un chico de La Rioja nacido en una familia de cafeteros que quería seguir a su manera lo que había mamado desde pequeño. Y lo ha petado: Satan’s Coffe Corner es LA cafetería de especialidad de Barcelona. En la mezcla está el misterio y el motivo de porqué marcos presume de hacer “el mejor café de Barcelona”. Y también miman el desayuno. Sobre todo el asiático. Este es uno de los pocos sitios de Barcelona donde podréis desayunar japonés, el ‘chou syoku’ (combinado con arroz, tortilla, sopa de miso, por ejemplo), aunque siempre hay una selección de cualquier buena alimento susceptible de tomarse con café. Muesli, pudín de chia, papillas, todo el canon de la comida ‘hipster’. ¡Incluso podéis desayunar ostras!
Brunells
Históricos son sus cruasanes, bizcochos de soletilla y ‘carquinyolis’. En un barrio fagocitado por el turismo, la Brunells sigue como si los últimos 15 años –el tiempo que hace que voy– no hubieran existido. Y eso es bueno: en la cafetería de esta pastelería puedes disfrutar de un buen café con leche lleno de azúcar blanco –nada de especialidad, sino aquel Bou tan fuerte que te despierta de un bofetón– y un cruasán de chocolate antológico. Finísimas y grasientas (llenas de manteca, en positivo) capas de hojaldre que envuelven un buen chute de chocolate negro. Hay muchos guiris, sí, pero esto todavía es terreno autóctono.
Uno de los lugares claves para desayunar en Gràcia: esta inmaculada cafetería es punto de reunión del profesional liberal, modernillo y ‘hipster’ de buen desayuno del barrio. El griego Pétros Paschalidis hornea cada día, sólo con ingredientes naturales, la versión helénica del donut: la Lúkuma. Los venden con todo tipo de sabores y rellenos, algunos tan sorprendentes como la de mastija, glaseado con esencia de resina. A menudo también hacen pruebas: últimamente he visto ‘lukumas’ cuadradas o con ‘topping’ de Oreo.